Los apartamentos tutelados han sido concebidos sin barreras arquitectónicas para facilitar la movilidad y el confort de los residentes. Todos los edificios disponen de ascensor y montacamillas, así como pasamanos en los pasillos. Las viviendas están adaptadas tanto en su diseño como en el equipamiento: anchura especial de las puertas, baño geriátrico con suelo antideslizante, asiento plegable de ducha y asideros, entre otros elementos. Estas características singulares se integran en una decoración agradable y hogareña que incluye mobiliario y electrodomésticos de primera calidad.