Desde el comienzo de la pandemia, el equipo de Apartamentos Tutelados se ha esforzado por aplicar los protocolos de limpieza y seguridad para reducir al máximo la incidencia de la COVID-19 entre los inquilinos y el personal.
Para ello, también hemos contado con la responsabilidad de todas las personas que viven en nuestros edificios, especialmente en los meses más difíciles. Han salido a la calle lo estrictamente necesario, han evitado las reuniones sociales y familiares y, sobre todo, se han preocupado unos de otros.
Como señala Lourdes Gorricho, Directora de los Apartamentos Tutelados, «contamos con la ventaja de que cada persona vive en su vivienda y pueden evitarse más fácilmente los contactos innecesarios. Tras el confinamiento, las zonas comunes se han reabierto, pero con mucha prudencia».
En cualquier caso, nadie se ha relajado en cuanto al cumplimiento de las medidas. Además de seguir las instrucciones de las autoridades, se han establecido varios protocolos precisos para mantener la asepsia de los espacios y velar por la salud de todas las personas. Se resumen en cuatro puntos principales:
1. Equipos de protección individual
El personal de conserjería-limpieza, mantenimiento y educación social llevan protección en todo momento durante su estancia en los edificios.
2. Desinfección y ventilación
Desinfección y ventilación regular de espacios y elementos de áreas de tránsito en los edificios (portales, ascensores, pasillos) y de las zonas de uso compartido (Salones sociales, gimnasios)
3. Información
Información a los inquilinos sobre las medidas de autoprotección, como distancia social, uso de mascarilla y geles desinfectantes, y sobre las normas de las autoridades.
4. Supervisión y contacto
Supervisión de la aplicación de las normas de las autoridades sanitarias en todos los edificios, y contacto regular con los inquilinos para interesarse por su estado de salud.
Mientras esperamos a que lleguen vías más eficaces de luchar contra el coronavirus, todos somos responsables de evitar su propagación.